Tratamiento capilar Moroccanoil

¡Buenos días bellezas!
¿Qué tal? Ya es mitad de semana y yo con unas ganas locas de que llegue el viernes para irme de puente.
Hoy en Beauty Blog by Susana vamos a ver el tratamiento capilar completo de Moroccanoil para dar volumen al cabello, así que en mi caso es el tratamiento Volumen y el aceite es el Ligth que es el específico para cabello fino (así es mi pelo). El tratamiento está compuesto por un champú, un acondicionador y el famoso famosísimo aceite capilar Moroccanoil.
Seguro que ya habéis leído un montón de opiniones sobre la marca y estos productos, pero en este caso yo os voy a dar la mía, así que si queréis saber cual es, ¡seguid leyendo!.

Empezamos por el champú, un producto que me ha sorprendido mucho ya que aparte de tener el pelo fino, lo tengo graso y tengo que tener mucho cuidado con los champús que me aplico para que no me aporten grasa al pelo, porque si no, al nada el pelo empieza a engrasarse, pero en este caso, aunque el champú contenga aceite de argán y otros nutrientes, el pelo no se me engrasa y me dura tiempo limpio, además de que le da mucho brillo y luminosidad al cabello.
Quizá con mi pelo tan lacio no es muy evidente el volumen, pero si lo noto menos apelmazado a la raíz.
El olor es muy bueno y su textura es muy densa cuando lo aplicamos en la mano, pero luego al contacto con el pelo mojado se convierte inmediatamente en espuma y hace mucha, por lo que con muy poca cantidad de producto tenemos más que suficiente para lavar todo el cabello.

A continuación, después de aclarar el cabello del champú, pasamos al acondicionador, el único producto que no me convence de los tres y es que para empezar no soy consumidora habitual de acondicionadores, prefiero usar una mascarilla capilar una vez a la semana y usar un aceite de medios a puntas cuando salgo de la ducha y antes de secarme el pelo para desenredar las puntas y darle protección frente al calor. Por ello este producto no suelo utilizarlo y cuando lo hago, no noto una gran diferencia en mis puntas, en general creo que los acondicionadores, al menos en mi tipo de pelo, no los necesito en cada lavado y en cambio para hacerlo una vez en semana se me queda corto frente a una mascarilla.

Tengo que destacar, eso sí, su dispensador, que tanto el acondicionador como el champú son muy fáciles y cómodos de aplicar en la ducha. También que ninguno de los dos lleva parabenos, ni sulfatos ni fosfatos y no alteran el color si está teñido o con mechas.

Y por último, el famoso aceite, que me ha gustado muchísimo. En la foto lo veis antes de estrenar (ya que siempre me gusta fotografiar los productos antes de utilizarlos) pero dentro de la caja y al abrir el tapón, nos encontramos con un dosificador de "pum" para sacar el producto de la mejor forma posible, ya sabéis lo fan que soy de los dispensadores, ya que así no se contamina el producto, se saca la cantidad necesaria sin desperdiciar nada y además es muy limpio, por lo que estoy encantada.
El aceite tiene dos formas de aplicación: en seco y en mojado. Yo siempre lo aplico en mojado, tras quitarle la humedad con la toalla. Lo aplico de medias a puntas y después me seco el pelo con el secador. Las puntas quedan muy suaves, nutridas y reparadas, ¡muy recomendado!. Y no engrasa nada el pelo, ni lo apelmaza, todo lo contrario, le da mucha vida y mucho brillo al cabello.

Esto es todo por hoy, ¿usáis alguno de estos productos?. ¿Cuál os gusta más? Y vosotras, ¿soléis usar acondicionador?